viernes, 29 de septiembre de 2017

No estan matando

Nos están matando solo por ser mujeres, por que pueden, no hay más, nos están matando por que queremos libertad, queremos la libertad que se les dio a los hombres y a nosotras no,  la libertad para salir de noche a beber, para vestir de la manera que nos gusta, para pedir un servicio de taxi e irnos solas a nuestras casas, nos están matando por querer salir a trabajar y desarrollarnos laborlamente por no aceptar el roll de género que se nos impuso desde que nacimos.

No estamos seguras ni en nuestras casas por que nos están matando nuestros novios, nuestros esposos, ex-esposos,  los hombres que pensamos que nos protegerían, pero no somos para ellos más que cosas, sus pertenencias, sus posesiones ni  tan invaluables porque  nos matan cuando ya no estamos en función de su placer. 

Cada semana nos indignamos por un feminicidio más y gritamos, lloramos, nos lamentamos, no sirve de nada, entre mas alzamos la voz parece que la violencia se exacerba más y más, una marcha más, más carteles, de nuevo las redes sociales incendiadas con dimes y diretes de uno y otro lado del patriarcado. Hombres y mujeres que aun no lo logran entender y le dan la razón al asesino, al poderoso, justifican que se nos siga poniendo en "nuestro lugar" parece que solo quieren dejar en claro un mensaje. 

                                                   "Si son libres las vamos a matar"

Y las vamos a matar cada vez con más saña, con mas odio, por que ustedes no pueden salir de noche, no pueden beber, no pueden negarnos el sexo, no pueden usar ropa sexy, no pueden caminar agusto por la calle sin enterarse que son nuestra pertenencia y podemos hacerles lo que se nos pegue la gana impunemente.

Nos están matando por exigir las mismas oportunidades que los hombres, por que ya nos dimos cuenta que no somos seres humanos de segunda, y el patriarcado es una hidra violenta y fuerte a la que le cortas una cabeza y le salen tres más. 

¿Cómo puede ser que hayan matado a Mara Fernanda Castilla Miranda aún sabiendo que era muy, muy posible que rastrearan el paradero del asesino? Ya no les importa nada, lo hacen porque no creen que los van a encontrar, no creen que van a tener que pagar, porque tenemos un estado fallído. 

¿Porqué diablos hay hombres exhibiendose en grupos perversos en las redes sociales como tocan a mujeres en el transporte publico? Como si eso fuera símbolo de hombría midiéndose la verga entre ellos a ver quien es la peor escoria y se felicitan y se alientan a violentar jovencitas.

El patriarcado tendría menos poder si las victimas no ayudáramos desde dentro a someter a otras, nosotras ayudamos al machismo cuando criticamos las decisiones de otras mujeres, cada que llamamos puta a una mujer libre, cada que no permitimos que nuestros hijos varones tengan responsabilidades en casa, cada que llamaos princesa a una niña y la tratamos como si fuera de cristal, cada que sexualizamos a las mujeres y las niñas, cada que no les decimos a nuestros hijos que no deben violar mujeres, porque al parecer es algo que se les debe decir desde la cuna.

-Hijo, lávate los dientes y no violes a ninguna mujer. 

-Hija lávate los dientes y no aceptes ningún tipo de violencia machista por mínima que sea ni de tu padre de ni de tus hermanos, ni de tu novio o esposo.

Servicios de transporte solo para mujeres, vagones en el metro solo para mujeres, eventos públicos solo para mujeres. esos no son privilegios, son una terrible pero necesaria medida que debería de darles vergüenza que tengamos que separarnos de los hombres porque no sabemos si se les va antojar violarnos o matarnos o restregarnos la verga sin nuestro consentimiento.

Yo sé perfecto que no todos los hombres son violadores o machistas pero son tan pocos los que no lo son que es difícil identificarlos entre la multitud y tampoco es que los vea haciendo nada para ayudarnos a sentir seguras. 

Mujeres, el machismo, el patriarcado, el gobierno, el capitalismo, la policía, no están haciendo NADA por ayudarnos, seamos más unidas, mas precavidas, menos confiadas, más fuertes física y emocionalmente, aprendamos a pelear por nuestra libertad, nuestros derechos y nuestra vida, nadie nos cuidará si no lo hacemos nosotras. ayudemos a las compañeras mujeres en todo lugar, en todo momento, no protejan a los abusivos, a los machos, a los violadores a los acosadores hay que cerrarles las puertas, hay que acorralarlos.

Si tu compañero de trabajo, amigo, hermano, tu padre, novio o esposo, tienen actitudes machistas, pequeños comentarios que evidencian su falta de respeto hacia el género femenino ¡cierra esa puerta! que él se sepa señalado, que sepa que lo que hace esta mal y que se le van a ir cerrando las puertas si sigue con esos comportamientos.

Boicoteemos a las marcas, la televisión, los servicios como Cabify, personas publicas con actitudes machistas.

Derrumbemos el machismo desde adentro, algunos sostienen que a los machistas los educan madres machistas, pues derrumbemos esa creencia desde la raíz, dejemos de alentar al machismo, nosotras tenemos el poder pero no nos hemos dado cuenta y permanecemos dispersas, el sistema se ha encargado de que no nos demos cuenta de que somos la mitad, de que no somos minoría, de que tenemos fuerza y de que unidas seriamos imparables.

Hagamos las pases con las otras mujeres, no nos pongamos el pie entre nosotras, la competitividad nos hace mejores pero no nos destruyamos en el camino ni seamos aliadas del machismo para conseguir privilegios no lo vale!























Sororidad, la complicidad entre mujeres.

Sororidad: Termino derivado de latín soror que significa hermana, recientemente utilizado para referirse a la hermandad entre mujeres que al percibirse como iguales puedan aliarse, compartir y cambiar su realidad debido a que todas de alguna manera hemos sido oprimidas por el sistema patriarcal.

La rivalidad entre mujeres no es un mito, antropológicamente hablando se remonta a la idea de que una mujer más atractiva y joven puede conseguir pareja y reproducirse así la competencia entre nosotras por un estatus biológico, reproductivo y social ha existido desde siempre.

Ser una mujer actual (blanca, heterosexual, cisgénero) competitiva, triunfadora y feliz requiere de un arduo esfuerzo ya que por un lado tenemos que trabajar muy duro para poder hallarnos un lugar de respeto entre los hombres y por otro lado competir con otras mujeres no solo en lo laboral, si no también en lo social, lo físico y lo económico.

Hay que trabajar mucho para deconstruir esa idea machista de que las mujeres somos rivales de otras de mujeres y que no podemos tener esa amistad honesta, esa complicidad y camaradería que existe entre los hombres.

Haciendo un ejercicio de análisis e introspección pregúntense quien de sus compañeras de trabajo, vecinas o incluso familiares mujeres les cae mal. ¿Por qué? ¿Cuál es el trasfondo de ese sentimiento?
¿Es acaso ella la culpable o soy yo? Y que puedo hacer para mejorar mi relación interpersonal con esa mujer. ¿Por qué tengo ese sentimiento de rabia por una mujer más hermosa, carismatica o triunfadora, es ella o es mi propia autoestima la que no me permite relacionarme de manera saludable con otras mujeres?

Somos más de la mitad de la población y aún somos tratadas como una minoría por que no nos hemos dado cuenta que unidas podemos ser más fuertes. Luchar contra el machismo es una tarea titánica y más aun cuando el patriarcado tiene a algunas o muchas de sus oprimidas como aliadas defendiendo un sistema caduco que sostiene que el mayor triunfo de una mujer en la vida es que "te toque un buen marido" belleza, hijos y una vida estable (proporcionada por tal marido), si no tienes eso no importa que tengas un posgrado y dos doctorados no has triunfado en la vida.

dejemos de utilizar fraces como

"El peor enemigo de una mujer es otra mujer"

"Las mujeres podemos despedazarnos pero jamás nos haremos daño"


Frases super violentas y misóginas que de tanto escuchar nos la creímos y es que al patriarcado le convine tenernos separadas y confundidas, peleando entre nosotras para no dirigir nuestra lucha a lo verdaderamente importante. La liberación femenina.

Basta ya de decirle puta a cualquier mujer que ejerce su sexualidad con libertad.
Basta ya de decirle zorra la mujer coqueta y sensual.
Basta ya de ser tan duras con la imagen personal de otras mujeres y la propia.
Basta ya de hablar a nuestras espaldas.
Basta ya de estar compitiendo entre nosotras de manera insana sobre todo por un hombre.














lunes, 11 de septiembre de 2017

Te quiero.



Desde que te conocí sentí una muy fuerte atracción hacia ti, algo que no me había sucedido antes con una mujer, no así con esa intensidad, contigo descubrí cosas en mi que no sabia que existían, nada de lo que te he dicho es mentira, me gustas eres atractiva y te admiro, eres una de las personas que mas admiro y aprecio por tu personalidad tu fuerza y tu valor, lamentablemente con todo y que me gustas y sé que es reciproco, no sentí esa chispa que se siente cuando te enamoras, cuando encuentras al amor y siento que tu tampoco, me gustaria saber que piensas al respecto.

Por el resto de mi vida vas a significar para mi la primera mujer que me provocó tanto deseo como no había podido imaginar, pase muy, muy buenos momentos a tu lado en todos los aspectos.

Nunca quise hacerte daño, espero no haberlo hecho, nunca fue mi intención tener en ti una velita prendida mientras encontraba a alguien más. Como ya sabrás estoy saliendo con alguien, espero que esto no melle nuestra amistad no quisiera perderla, eres importante para mi. Te quiero "H"!


martes, 5 de septiembre de 2017

Sobre el enamoramiento y el amor.

Parecían años intentando extirpar el veneno de una relación amorosa que acabó enferma y triste, después de un largo tiempo intentando sacarlo de mi corazón en repetidas camas sin rumbo alguno,  buscando el amor en lugares equivocados, por ahí encontré a alguien que me gustaba y yo le gustaba también, pero nunca ardió la llama demasiado fuerte como para incendiar nuestros corazones.

El llegó a mi como cuando después de una gran tormenta un rio se desborda y arrasa con toda la basura, te deja vacía pero purificada, con escombros pero con la herramienta y el material para edificar un nuevo hogar, uno que no se parezca al anterior, uno nuevo, que resista las tormentas y la corriente.

Aún no sé como se escribirá esta historia, no se si tendrá un final feliz,  lo que si sé es que estoy muy ilusionada, he vuelto a sonreír como una idiota con mensajes de texto y llamadas, he vuelto a vibrar con el roce de una caricia y con sus besos, me siento hermosa bajo sus ojos, no es que no me sintiera hermosa antes pero es diferente ahora.

Quiero conocerlo, quiero saber todo de él, que me lea de principio a fin hasta entre lineas, que me inhale y me beba, que se impregne de mi,  de mi sonrisa y de mis pupilas, de mi carne que noche a noche clama por él.

Lega el atardecer y pienso que este enamoramiento tan apasionado e intenso va a enloquecerme, que ya no estoy en edad de que alguien haga brincar tanto a mi corazón,  creo que saldrá disparado en cualquier momento, en su búsqueda, en su encuentro.

Llega el día y estoy convencida de que habrá que inténtalo cuantas veces sea necesario, porque   "para siempre" a veces dura solo un  instante y hay que saberlo aprovechar, como cuando disfrutas la intensa chispa de una bengala o el sabor de un helado derritiéndose en el verano.

El sentimiento del amor no es algo que tenga un fin, no hay que dosificarlo, no sirve para nada tenerlo ahí guardado sin dárselo a nadie, no es moneda de cambio ni hay que repartirlo, crece a medida que lo das, no se crea ni se destruye solo se transforma, cambia de depositario y te alimenta a ti entre más se lo das a otro.

Hay que amar cuanto más podamos mientras este instante al que llamamos vida se nos escurre de las manos.